Lo primero es moverse. Aunque carece de forma, el viento mueve todo lo que tiene forma; y a través del movimiento de todo lo que tiene forma, se percibe.
Al sentirlo, todo empieza a estremecerse por simpatía. Alzan su voz hasta los agujeros más pequeños del cielo y de la tierra. Los bambús, el agua, los quicios de las puertas, lo acompañan con sus voces. El polvo se arremolina, se agitan los árboles, tiemblan las casas y hasta los cables de la luz se ponen a vibrar. El cielo y la tierra están envueltos en el viento.
Lo primero es moverse, y mover lo cercano. Si no responde, abandónalo e intenta más allá. Si no hay reacción, ve más lejos. Mientras no se extinga el movimiento profundo, irá propagándose hasta el infinito, Esto es el viento. La fuerza que levanta el viento existe en el fondo de todos. Al enfrentarte a lo inmóvil, no pierdas la esperanza, Si el movimiento está latente dentro de ti, se manifestará: lo que se ha comunicado a su vez impulsa movimiento en otros.
Que cada uno se ponga en movimiento desde sí mismo: éste es el primer paso.
Revista Zensei, 1977
Haruchika Noguchi
HARUCHIKA NOGUCHI
Nació en Ueno, Tokio, en septiembre de 1911 como el segundo hijo de una familia de nueve hermanos.
Debido a los efectos de la difteria que padeció en su infancia, tuvo dificultades para hablar. Durante su niñez, vivió bajo el cuidado de un tío, médico especializado en medicina tradicional china, y se dedicó intensamente a la lectura. En el año 1923, a los doce años, experimentó el Gran Terremoto de Kantō. Al ver a personas sufriendo entre los escombros, sintió instintivamente la necesidad de extenderles la mano, lo que ayudó a muchos a recuperarse. Este evento lo inspiró a dedicarse al camino de la curación.
Exploró de manera independiente métodos de salud y terapias tanto orientales como occidentales. A los quince años, abrió un dojo en Iriya y fundó el grupo terapéutico Shizen Kenkō Hojikai (Asociación para la Preservación de la Salud Natural), centrado en el Yuki (una técnica de transmisión de energía) y el ejercicio Katsugen. A los diecisiete años, publicó los Zenseikun (Principios de Vida Plena), en los que promovía vivir en armonía con la naturaleza, y desde entonces orientó sus actividades hacia el ideal de "vivir plenamente y con vitalidad".
Fue consejero de la Asociación Japonesa de Terapeutas y contribuyó a la fundación de la Gran Asociación Unificada de Terapeutas de Japón. También consolidó sus principios terapéuticos al sistematizar diversas técnicas bajo el nombre de Seitai Sōhō (Método Integral de Alineación Corporal). En el año 1945 estableció la Asociación Seitai Sōhō como institución de formación para instructores en estas técnicas. Hacia finales de la década de 1940, completó las bases del Taiheki, que estudia la personalidad humana a través del cuerpo.
A partir de entonces, decidió enfocar su actividad no en curar enfermedades, sino en extraer la capacidad innata de las personas para guiarlas hacia la salud. Redefinió sus prácticas como "educación física" y abandonó la idea de "tratamiento". Su filosofía se centró en enseñar a las personas a sostenerse por sí mismas, sin depender de nada externo. En 1956, fundó la Asociación de Educación Física Seitai, basada en esta visión de la salud, obteniendo el reconocimiento del Ministerio de Educación. Además de la guía individual, promovió ejercicios Katsugen, el método Yuki y otros estilos de Seitai a través de talleres en todo Japón. También incursionó en el estudio del subconsciente, la crianza, la educación y otras áreas, dejando numerosos escritos.
Amaba la música profundamente y consideraba a Pau Casals su único maestro. Junto a su esposa Akiko (1916–2004) tuvo cuatro hijos. Falleció en junio de 1976 , a los 64 años, en su hogar en Komae, Tokio, rodeado de su familia.
Seitai Kyokai Tokio
ASOCIACIÓN SEITAI DE JAPÓN
La Asociación Seitai fue fundada en el año 1956 (Shōwa 31) por el difunto Haruchika Noguchi y fue reconocida por el Ministerio de Educación, Cultura, Deportes, Ciencia y Tecnología de Japón (antiguo Ministerio de Educación) como una corporación deportiva.
El verdadero propósito del desarrollo de la fuerza física, que es el objetivo del ejercicio físico, no es otro que la capacidad de manifestar plenamente nuestras habilidades con vitalidad en la vida cotidiana. Para profundizar realmente en lo que consideramos la base del desarrollo físico, es decir, "armonizar el cuerpo", es necesario adoptar una perspectiva amplia y reflexionar sobre nuestra propia vida.
Nuestra asociación promueve una forma de vida acorde con la espontaneidad de la vida. Comprender y sustentarse en esa espontaneidad permite utilizar el cuerpo y la mente con libertad y plenitud en la vida diaria. Esta es la postura fundamental sobre la educación física que defiende la Asociación Seitai. Solo a través de este enfoque es posible vivir plenamente nuestra existencia.
Cabe destacar que, el 1 de abril de 2013 (Heisei 25), la asociación fue reconocida por la Oficina del Gabinete de Japón como una corporación de interés público.
Seitai Kyokai Tokio
https://seitai.org/information.html